martes, 30 de abril de 2024

Todas Las Hadas del Reino - Laura Gallego

 


Hadas, brujas, princesas en apuros, héroes en busca de hazañas y personajes de cuento pueblan la novela de la que vamos a hablar hoy. Se trata de Todas las Hadas del Reino, de la escritora valenciana Laura Gallego. Desde muy pequeña he disfrutado enormemente con los libros de esta escritora tan creativa e imaginativa. Siempre he sido muy fan del género fantástico, y los ejemplares de Laura Gallego han sido una de las piezas claves para formar mi gusto en la fantasía. Es por eso que cuando Todas las Hadas del Reino fue publicada en el 2015, prácticamente me fulminé la novela en dos días. 


El libro nos plantea un universo en el que los cuentos de hadas son una realidad muy presente en la vida cotidiana. En este mundo de magia y costumbres medievales, aquellos humanos que lo desean con la suficiente fuerza cuentan con la protección de un hada madrina, como suele suceder en los cuentos que todos hemos escuchado desde pequeños. Lo que no sabíamos es que no existe solo un hada madrina, en realidad han habido 7 desde hace 300 años. La trama de la novela se centra en Camelia, la más responsable y maternal de las hadas madrinas, y nos la presenta como un hada sobrecargada por las necesidades y exigencias de sus diversos ahijados. Un buen día se presenta en casa de Camelia otra de las hadas madrinas, Orquídea, que se ha aparecido allí para solicitarle a su vieja amiga que asuma la protección de uno de sus ahijados. Simón, el muchacho en cuestión, necesita la ayuda de un hada madrina para lograr conquistar el corazón de la princesa Asteria en cuyo castillo trabaja como caballerizo. Camelia asume su tarea con diligencia y pragmatismo, pero poco a poco se van acumulando las dificultades, y todo esto, sumado a los diversos problemas que se acumulan en su día a día, da lugar a una fascinante historia repleta de sentimientos encontrados, traiciones y sacrificios que no deja indiferente a nadie. A lo largo de toda la novela, hacen acto de presencia una gran cantidad de cuentos y leyendas sacados desde la tradición oral hasta los mismísimos cuentos de Perrault que cualquier lector con una cierta cultura de la literatura podrá apreciar. Nuestra protagonista, Camelia, está magníficamente delineada por Laura Gallego, dejándonos una hadita sensible con una gran profundidad en su personalidad que, a pesar de su caracter sobrenatural, sufre de debates internos y dudas morales en principio más propios de los seres humanos, que proporcionan una interesante perspectiva al lector digna de considerar. 

Otro personaje que introduce la autora es Ren, un zorro Ancestral. Los Ancestrales son otros seres de los que pueblan los cuentos de toda la vida, animales inmortales que poseen poderes mágicos y un gran ingenio que en ocasiones ponen al servicio de los humanos. Ren es un viejo amigo de Camelia que volverá a cruzar su camino con el hada madrina, dotado también de una interesante personalidad. A mí me ha resultado particularmente especial este personaje por su sagacidad y perspicacia así como ciertos hechos que tienen lugar a lo largo de toda la novela.

En general, la novela es un auténtico disfrute, dado que es muy agradable caer en la cuenta de que una determinada hada madrina es la que fue responsable de la historia de Piel de Asno, o que Camelia es la responsable de otros muchos cuentos conocidos por todos. En mi opinión, esto otorga un encanto especial a la novela. Por otro lado, el ritmo de lectura es tremendamente fluido. En su momento leí el libro varias veces, y hace muy poco lo he vuelto a leer, en no más de dos días, aunque el volumen consta de casi 500 páginas. 

Si eres una persona que disfruta con la fantasía, esta es la novela perfecta sin duda alguna. También es destacable la enorme carga emocional de la historia, puesto que sorprende que una narración que podría ser un cuento de niños perfectamente, posea tan alto voltaje de afectos y traiciones simultáneamente. 


Y resulta que este año Laura Gallego ha sorprendido publicando una segunda parte a esta novela. En realidad ella había afirmado originalmente que este libro estaba completo de por sí y no le hacía falta ninguna otra parte. De hecho la historia está bien cerrada, con todas las tramas resueltas y un final satisfactorio si bien quizás un poco agridulce (si se me permite el pequeño spoiler). Es por ello que ha resultado muy sorprendente el hallazgo de la segunda parte, Todos los Hombres del Rey. Por suerte ya he tenido el gusto de leer la nueva novela y puedo asegurar que merece mucho la pena. Tanto, que dentro de muy poco publicaré una nueva entrada hermana de esta. Estuve considerando la posibilidad de hablar de ambas novelas en un mismo post, pero creo sinceramente que merecen una entrada cada una. 


Os animo a leer esta novela y descubrir la tremenda variedad de personajes que hacen su aparición. Cuando lo hagáis, o si ya la habéis leído, comentadme cuál es vuestro personaje favorito y por qué, seguro que será interesante escuchar diversas opiniones.

domingo, 31 de marzo de 2024

Laura - Vera Caspary

 


La entrada de hoy me hace especial ilusión porque el libro que voy a reseñar llevaba en mi lista de lectura más tiempo del que me gustaría reconocer. Se trata de la novela de género negro Laura, escrita por Vera Caspary en 1942 y llevada a la gran pantalla en 1944. En mi caso, he disfrutado en numerosas ocasiones de la película, porque es una auténtica maravilla cinematográfica. No ha sido hasta hace poco que tuve la oportunidad de detenerme a leer la novela con calma. No obstante, como se suele decir, haced lo que yo os digo, no lo que yo hago. Es decir, recomiendo encarecidamente que os leáis primero el libro y después veáis la película, puesto que, salvo alguna excepción, la experiencia es mucho mejor al seguir este orden de los factores. 

La novela trata sobre el asesinato de una hermosa y exitosa mujer llamada Laura Hunt, la cual aparece tendida en su salón en enigmáticas circunstancias. La investigación del caso recae entonces sobre el detective Mark Macpherson, el cual va conociendo rasgos de la vida que llevaba la señorita Hunt a través de sus observaciones y los comentarios de los que mejor la conocían. 





Otros dos personajes clave a lo largo de la novela son Shelby Carpenter y Waldo Lydecker, el novio y el mejor amigo de Laura respectivamente. Carpenter, el cual se iba a casar con la víctima en los días siguientes al triste suceso, es un hombre con pocos recursos con un caracter reservado y poco amistoso que no le ayudan a congraciarse especialmente con Macpherson. En cambio, Lydecker, un descarado y egocéntrico personaje de la alta sociedad neoyorquina, posee una explosiva personalidad. Lydecker domina el arte de la conversación y no duda en emplear un tono mordaz con aquellos a quienes considera inferiores. 




A lo largo de la novela, la autora explora los recovecos de la personalidad de cada personaje, especialmente de los cuatro protagonistas previamente mencionados. Caspary consigue aportar a esta novela de misterio ciertos tintes de caracter psicológico que tendrán una importancia clave en el desenlace de la novela. Resulta muy interesante ir descubriendo las diversas facetas de la personalidad de cada protagonista y reflexionar en base a ello sobre cómo afectan estas características personales a la toma de decisiones de los mismos. 


Además, la novela consta de varios giros inesperados en la trama que hacen que el lector se vea obligado a replantearse en múltiples ocasiones lo que cree que sabe acerca de cada personaje. De esta forma, la historia resulta muy dinámica, porque en el momento que piensas que ya lo has captado y que por fin conoces la clave del misterio, te llevas una sorpresa impactante.

Cabe destacar la enorme habilidad narrativa de Vera Caspary, que tiene una prosa fácil de leer, con abundantes descripciones y personajes tridimensionales. 



Con respecto a la adaptación cinematográfica, solo se puede decir que se trata de una joya audiovisual. El reparto es de lo mejor, con nombres como Gene Tierney, Dana Andrews, o Vincent Price. La imagen a lo largo de toda la película es maravillosa, con planos clásicos del cine negro y escenarios muy trabajados que ayudan a meterse de lleno en el Nueva York de los años 40. Por otro lado es muy de agradecer que la historia se ha respetado en su mayoría, sin realizar cambios demasiado graves que afecten a la trama. 





Os animo a todos a leer y ver Laura si es posible, porque es una experiencia que merece mucho la pena y forma parte de la historia de la literatura y el cine. Si ya la conocéis, contadme en comentarios cuál es vuestra opinión respecto a la personalidad de Waldo Lydecker, el cual a mi me parece uno de los personajes más carismáticos de la novela. Saludos a todos.




jueves, 29 de febrero de 2024

El Joven Moriarty: El Misterio del Dodo - Sofía Rhei

 


Para cerrar febrero hoy traigo al blog un pequeño ejemplar de lectura fácil y rápida que a mí personalmente me encanta. Se trata de “El misterio del Dodo”, de Sofía Rhei. Se trata de un libro de misterio con un cierto tono “inocente”, ligeramente infantil, pero a su vez, una lectura perfecta para cualquier edad (niños y no tan niños). La autora crea en el libro una historia que se amolda a la estructura de las novelas clásicas de misterio al estilo de Agatha Christie o Sir Arthur Conan Doyle. Como era de esperar, la trama se sitúa en la época victoriana, con caballeros y damas que se comportan de manera apropiada a lo que era de esperar en la época, a excepción quizás del protagonista y su hermana. Inspirada por Conan Doyle, Rhei coloca como protagonista de la novela a un James Moriarty de 10 años. La historia nos presenta al famoso personaje de los libros de Conan Doyle en su entorno familiar durante la infancia, describiéndolo como era de esperar que fuera este ladino personaje de pequeño: con sus rasgos de astucia y cruel inteligencia en pleno desarrollo. 

Los acontecimientos se desencadenan al llegar a la residencia de los Moriarty el tío Theodosius con un ejemplar de pájaro dodo, al que ya se creía extinto, el cual desaparece repentinamente. La desaparición se produce, como es propio en este tipo de novelas, durante una multitudinaria reunión en la mansión, con invitados de alto rango y todos los criados corriendo de acá para allá. Nuestro protagonista, el joven Moriarty, se propone entonces descubrir cuál ha sido el destino del enigmático animal antes de que lo haga su hermana, Arabella, con la que mantiene una rivalidad prácticamente malsana. 



La historia se desarrolla como una clásica narración de detectives, una auténtica partida de Cluedo en la que hay numerosos sospechosos con múltiples motivos para querer deshacerse del animal, así como abundantes pistas, unas útiles y otras engañosas. 

A lo largo de toda la lectura, resulta muy ameno ser testigos de la enrevesada personalidad de James y la compleja dinámica que supone su relación con todos los que le rodean, desde su hermana hasta su tío, pasando por su padre y el propio Charles Darwin, que hace un sorprendente y simpático cameo en la novela. 


Además, la historia va acompañada de preciosas ilustraciones de los personajes y las escenas más significativas que ayudan al lector a visualizar la sucesión de los acontecimientos. En definitiva, el libro es un verdadero gustazo, y resultará la elección perfecta para cuando queramos una lectura ligera y entretenida que ayuda a despejar la mente. 

miércoles, 31 de enero de 2024

Poesía Completa - Robert Frost

 


En el post de hoy, el primero del año 2024, he decidido hablar un poco de uno de los libros que me han traído los Reyes Magos en esta ocasión. 

No he comentado esto por aquí todavía, pero entre otras muchas de las cosas que ocupan mi vida, desde hace ya algún tiempo soy estudiante de Filología Inglesa. Cuando me decidí por esta carrera, que hago principalmente por gusto, estuve considerando otras opciones dentro de las humanidades. Valoré largo y tendido opciones desde Filosofía o Historia del Arte hasta las diversas Filologías. 

Lo que me hizo decidirme concretamente por la Filología Inglesa fue mi amor por el idioma y su magnífica literatura, que siempre me ha fascinado e inspirado curiosidad. Estaba deseando toparme con nuevos autores, y descubrir el significado detrás de obras de otros que ya conocía como William Shakespeare, Oscar Wilde o Jane Austen. 


Uno de mis grandes descubrimientos fue el poeta modernista americano Robert Frost. Obviamente había oído hablar de él en alguna ocasión pero en realidad nunca me había detenido a leer ninguna de sus obras ni sabía nada sobre su estilo e historia. Fue al estar estudiando el extensísimo currículum de Literatura Norteamericana cuando di con Frost y me enamoré de su poesía.

Como disfruté tanto en su momento con todas las obras que tuve tiempo de analizar, este año pensé que ya iba siendo momento de agenciarme un buen ejemplar de su Poesía Completa. Así que se lo pedí a mis Reyes Magos y debo decir que me consta que les supuso un gran reto. Sobre todo porque yo pretendía encontrar un ejemplar en inglés, ya que considero que la mejor manera de apreciar la poesía (y realmente cualquier obra literaria) es leerla en su idioma original, y no fue cosa fácil. Pero finalmente me llegó el ansiado volumen y no puedo ser más feliz de poseer semejante tesoro.






Para aquellos que no conozcan a este prodigio, Robert Frost fue un poeta de inicios del XX, considerado uno de los grandes pilares de la poesía norteamericana. Es también el único poeta con nada menos que 4 Premios Pulitzer de poesía en su haber. 

Su estilo se caracteriza por el uso de temas cotidianos aparentemente simples en un ámbito rural, como pueden ser un bosquecillo, una tormenta, un pastor, las flores, o un viejo granero. Los poemas ensalzan la belleza de la vida humilde y tranquila, así como el valor de detenerse a apreciar lo que nos rodea dentro de su simplicidad. Además Frost emplea un vocabulario fácil de leer pero no por ello menos hermoso, haciendo que sea una poesía muy agradable a la vez que evocadora.

Dos de los poemas que más estuve analizando fueron los de “El Camino No Elegido” y “Al Pararme Junto al Bosque Una Noche de Nieve”. Ambos son de los más famosos del autor, el primero de los dos incluso es citado en la película de El Club de los Poetas Muertos, que analicé hace un tiempo en el blog. 

Estos solo son una pequeña muestra del enorme volumen literario que produjo a lo largo de su vida, pero son dos buenos poemas por los que empezar a conocer a este maravilloso poeta. Os dejo a continuación el primero, uno de mis favoritos.



AL PARARME JUNTO AL BOSQUE UNA NOCHE DE NIEVE



Creo saber de quién es este bosque.

Su casa está en la aldea, sin embargo; 

no podrá ver cómo aquí me detengo

a contemplar su bosque cubierto por la nieve.


Mi pequeño caballo debe pensar que es raro 

pararse en este sitio sin granjas a la vista

entre el helado lago y este bosque

en la noche más lóbrega del año.


Sacude las campanillas del arnés

para preguntar si me habré equivocado.

El único otro sonido es el barrido

calmo del viento y de los copos suaves.


El bosque es hermoso, oscuro y denso,

pero tengo promesas que cumplir,

y mucho que andar antes de dormir,

y mucho que andar antes de dormir.



Solo leerlo me produce una paz mental que cuesta describir. Si bien es cierto que se pierden algunos detalles con la traducción al español, se pueden apreciar numerosos detalles poéticos que no dejan indiferente al lector. La historia es bien sencilla: un hombre (posiblemente comerciante de algún tipo) acostumbrado a viajar por trabajo, se detiene en pleno viaje para admirar el bosque en el que se acaba de adentrar. Podemos interiorizar con él la inmovilidad del ambiente, casi da la impresión de que se trata de un cuadro. Hasta el propio caballo, acostumbrado a la repetición de rutinas constantes se extraña de este gesto tan poco común en el protagonista (y, cabe reflexionar, también en todos nosotros, porque ¿Quién puede afirmar que en pleno caos rutinario se detiene a disfrutar de las vistas?). 

Y como pincelada final, nos quedamos con ese verso que se repite dos veces como una especia de letanía. Se puede deducir, dado el contexto, que es posible que el protagonista se haya quedado dormido en su carruaje, por el cansancio acumulado del viaje; o quizás solo se quedará un poco más para continuar su trayecto tras esta breve parada.


Esto solo es un pequeño análisis, realmente se podría decir mucho más y también podríamos discutir mejor cada pequeño detalle, pero en mi opinión lo bonito de la poesía es que cada uno lo interprete desde su propia realidad y saque sus propias conclusiones.


Para finalizar, os recomiendo a todos que en cuanto sea posible saquéis un poco de tiempo para leer y paladear cualquier poema de Frost. Y si ya lo conocéis, os invito a compartir vuestro poema favorito y así lo podemos comentar. ¡Os leo!

domingo, 31 de diciembre de 2023

Adiós, Señor Chips - James Hilton



El libro que hoy nos ocupa es una pequeña gema oculta en el transcurso de la historia (al menos para los lectores de la actualidad, puesto que yo no he oído ni leído en ninguna parte nada al respecto). Se trata de Adiós, Señor Chips de James Hilton. Este escritor es mundialmente conocido por su novela Horizontes Perdidos, con la que convirtió el ficticio monasterio de Shangri-la en un icono cultural para representar una utopía paradisíaca ideal. 

Poster de la película de Horizontes Perdidos (1937)


Aunque menos conocida, Adiós, Señor Chips es una lectura igualmente refrescante y tranquilizadora. La trama narra la vida y enseñanzas de un profesor llamado Chipping, que imparte clases desde finales del siglo XIX en una típica escuela inglesa de anticuadas y regias costumbres. Chipping es el prototipo de caballero inglés de toda la vida durante la época victoriana. La narración proporciona una tierna visión de las maneras que tenía el Señor Chips de dirigir las clases y establecer relaciones profesor-alumno a lo largo de toda su existencia. El lector será testigo de la evolución que tendrá lugar en un profesor que se veía dominado por la timidez al iniciar la carrera de obstáculos que es la enseñanza, convirtiéndose en un avezado maestro de latín y griego con experiencia y tino hasta para asumir la dirección de Brookfield, el magnífico colegio que aparece en el libro.


La novela tiene un marcado tono sentimental, que en ocasiones, y dependiendo del lector, puede llegar a ser excesivamente tierno, pero que al fin y al cabo otorga un aire especial y cariñoso a la historia. Hilton exhibe además a través de su protagonista una gran nostalgia por la época victoriana, así como un profundo respeto a los más tradicionales valores ingleses. 

Un elemento también muy presente en el argumento es la evolución social e histórica de finales del siglo XIX e inicios del XX. Somos testigos parcialmente de las sucesivas guerras y conflictos (con énfasis en la Primera Guerra Mundial) que han tenido lugar a lo largo de la historia con una perspectiva distinta a la puramente bélica: la de unos profesores y estudiantes que deben continuar con la labor de la docencia mientras sea posible. Cabe subrayar que Hilton se inspiró, además de en sus propios años como alumno en instituciones del estilo de Brookfield, en su padre y un profesor suyo llamado W. H. Balgarnie, dos de las figuras que más le marcaron en su vida.


Para finalizar, es destacable comentar que la novela es considerablemente corta (apenas consta de 100 páginas), por lo que es una lectura recomendable cuando lo que buscamos es algo rápido y sencillo de asimilar. Esto último lo digo porque está escrita en un formato fácil y sin grandes pretensiones, de manera que no hay grandes acrobacias literarias contra las que pelearse al leer sus líneas. 


Por último, pero no menos importante, aprovecho para desearos a todos un Feliz Año 2024, que venga repleto de buenas nuevas y alegría. 🎄🥰🌟💖🌙

domingo, 10 de diciembre de 2023

EMBELESO


El Tintero de Oro en su 39ª edición, que se dedica a la saga de Harry Potter (de la que soy muy fan), organiza un concurso de relatos de temática relacionada con la magia. Esta es mi aportación, que consta exactamente de 900 palabras.


EMBELESO

Diana era con diferencia la niña más adorada del internado para huérfanos de aquella perdida esquina del mundo. Era este ciertamente un fenómeno curioso, puesto que la chiquilla destacaba notablemente por sus peculiaridades y no solía buscar la compañía y aprobación de los demás.

Para empezar, su aspecto físico era llamativo en sí mismo. Tenía un largo cabello rubio platino, penetrantes ojos azules, una tez muy pálida, y era esbelta como una torre de marfil; cuando los niños de aquella región solían ser más bien morenos y bajitos como pequeños troncos de árboles, y no estaban nada acostumbrados a ningún tipo de exotismo. Diana era una niña excéntrica, con una sensibilidad por encima de lo normal y una personalidad caprichosa en extremo. Era capaz de quedarse durante horas en la orilla del lago que había cerca del orfanato, observando el bosque que le rodeaba y escuchando con atención (nadie sabía qué escuchaba, estando la residencia tan aislada entre montañas), en lugar de jugar con el resto de sus compañeros. Otro rasgo que caracterizaba a nuestra protagonista era su constante estado de aparente despiste, puesto que en numerosas ocasiones extraviaba sus pertenencias y no se las encontraba por ningún lado. Esto podría parecer normal si lo que perdiera fueran solo bolígrafos o gomas de borrar, tal vez un zapato también, pero en una ocasión llegó a desaparecer su propia cama (hecho que desconcertó profundamente a los cuidadores y supuso un cisma en la organización del orfanato, con acaloradas discusiones plagadas de acusaciones cruzadas en las que una limpiadora estuvo a punto de dimitir, pero sin ninguna explicación satisfactoria para nadie). 

Pero quizás, el elemento que más le diferenciaba del resto de niños era que en realidad no era huérfana. Cuando era un bebé de pocos meses había aparecido una noche estrellada en el escalón de entrada al orfanato, apoyada en un mamotreto muy ajado sellado de manera que fuera imposible de abrir, con un papel arrugado en sus pequeñas manitas. Aquel pergamino tenía un mensaje críptico que los responsables del internado no supieron interpretar, en el que ponía con caracteres imprecisos y borrosos lo que ellos creyeron que era el nombre de la criatura, Diana, seguido de un mensaje en el que se afirmaba que regresarían a por la niña cuando estuviera preparada. En circunstancias normales, no habrían aceptado la tutela de una niña cuya procedencia no estaba clara, puesto que el orfanato se preciaba de su exclusividad, pero Diana tuvo un efecto subyugante en los encargados. Se sintieron impelidos a cuidarla y hacerla feliz hasta donde les fuera posible, así que decidieron hacer la vista gorda y admitirla bajo su custodia.

A pesar de todas sus rarezas, Diana era prácticamente venerada por sus compañeros; tenía gestos de amabilidad con sus iguales, y solía tratar muy bien a todos, halagada por las muestras de cariño que le daban. 

No obstante, cuando contaba con 11 años, una niña trató de robarle el libro con el que llegó al asilo (el único vínculo que le unía a sus desconocidos padres), y cuando Diana la encontró con las manos en la masa su enfado fue tal que, dominada por la ira, aterrorizó a la traviesa ladrona y sin saber cómo estuvo a punto de quemarle la cara.

Este episodio asustó mucho a Diana, que aunque a estas alturas ya se había dado cuenta de que tenía algunas habilidades extrañas, no les había dado mayor importancia. En ese día fatídico tomó conciencia del peligro que podían suponer sus poderes para los demás si no los controlaba. Pero…¿Cómo controlar algo de lo que no sabía nada? 

Fue entonces cuando se le ocurrió que tal vez en el libro encontrara alguna respuesta a su situación. Pasó un par de días tratando de abrir el volumen sin éxito alguno y se obsesionó hasta tal punto que lo llevaba consigo a todas partes. 

Una tarde, cuando estaba en el bosque escuchando esos chillidos lejanos tan parecidos a cánticos que solo ella parecía oír y que tanta impresión y nostalgia le provocaban, le sobrevino un impulso repentino de gritar y cantar, imitándolos. Y para su descomunal sorpresa, produjo con gran facilidad y naturalidad un quejido sobrehumano idéntico a aquellos que trataba de reproducir. Repentinamente el libro se abrió y cayó a sus pies. Pudo ver que en la primera página se leía el título “Breve Historia de la Magia”.

Estupefacta, Diana empezó a pasar las páginas hasta que llegó a una que parecía estar más manoseada, y lo que vio en ese momento capturó su atención por completo. Aquella hoja estaba repleta de ilustraciones de mujeres hermosas de aspecto temible con el pelo rubio y la piel blanquísima. Llevó sus ojos al inicio del capítulo y leyó: “Veelas: esencia y origen”. El primer párrafo detallaba las características de estos seres mágicos, que eran prácticamente una descripción palabra por palabra de la propia Diana, y a esta ya no le hizo falta leer más. En el preciso instante en que leía aquellas líneas había tomado la resolución de marcharse para siempre. Seguiría aquellas voces que había escuchado desde que le alcanzaba la memoria, y que, ahora se daba cuenta, le dirigirían hacia el enigma de su identidad. 

Desde aquel aciago día, el internado perdió una alumna, pero ganó numerosas leyendas que narrar al irse a dormir. Leyendas sobre la misteriosa muchacha de extraños poderes que desapareció para no volver jamás.



"La Légende des Willis" de Hugues Merle (1847)

En el proceso de investigación y documentación para escribir este relato he tenido la gran fortuna de encontrar este cuadro que considero como ideal para acompañar el texto.


Por último, pero no menos importante, adjunto este nocturno de Mélanie Chassel, que es en mi opinión sencillamente perfecto como banda sonora del relato. 

jueves, 30 de noviembre de 2023

Holly - Stephen King

 


En el post de hoy vuelve a hacer acto de presencia en Mi Pequeña Alejandría uno de mis escritores favoritos: Stephen King. Como no puede ser de otra manera, me leí su último libro tan pronto como cayó en mis manos, y una vez más, me ha resultado complicado despegar los dedos y los ojos de las páginas. 

Holly -ese es el título del libro, así como el nombre de su protagonista- sigue las aventuras de una de las figuras creadas por el autor a lo largo de sus numerosos años publicando novelas. Holly Gibney es una detective que King presentó a sus lectores en Mr Mercedes, publicada en 2014. En esa novela (que no he leído todavía), Holly es compañera del protagonista de la misma, Bill Hodges, y a partir de entonces crean una agencia de investigadores privados llamada Finders Keepers que protagoniza unas cuantas historias desde entonces. 

Yo conocí a Holly cuando leí El Visitante, novela en la que Gibney acapara el foco principal y con la que yo conocí (y me enganché) a Stephen King, y la volví a ver en La Sangre Manda.

Así pues, Holly es una novela en la que se habla en numerosas ocasiones haciendo referencia a eventos de historias anteriores, puesto que todo influye en el temperamento de cada personaje. Por lo tanto, quizás sea recomendable haber leído las novelas previas antes de proceder con esta, pero no es imprescindible, puesto que King es inteligente y sabe que habrá mucho público que no esté al corriente de esta información o que directamente no quiera leerse otras dos o tres novelas más, así que cuando es necesario hace que los personajes mencionen eventos del pasado y clarifiquen la situación. Esto soluciona el problema, así que la única desventaja es que puede que los que no hayáis leído las otras (como es mi caso con Mr Mercedes) os llevéis algún que otro spoiler. 


La trama se ubica en una pequeña ciudad del Middle West estadounidense, cerca de Chicago, durante el año 2021. Finders Keepers está cerrada temporalmente por motivos personales de Pete Huntley (el socio de Holly) y la propia Holly (que se ha visto obligada a cerrarla a pesar de que prefiere seguir trabajando). Así están las cosas cuando Holly decide escuchar a una mujer llamada Penny Dahl que dice estar desesperada porque ha desaparecido su hija y nadie hace nada por ella. En un principio, Holly trata de no implicarse demasiado en la investigación, pero poco a poco irá descubriendo cada vez más hechos que no acaban de cuadrar, y, guiada sobre todo por un instinto y olfato detectivesco descomunal, se irá involucrando más y más hasta llegar a un punto de no retorno. Otros protagonistas muy peculiares e importantes en la historia son Emily y Rodney Harris. Se trata de un matrimonio de ancianos profesores de la universidad local que ocultan un secreto horripilante tras una fachada de buenas apariencias y logros académicos. 


Uno de los elementos más llamativos del último ejemplar de King es esta última pareja, porque, como sabremos nada más empezar el libro, resultan ser unos criminales de lo más inesperados. Porque…¿Quién sospecharía de una pareja tan encantadora y frágil como estos dos octogenarios? Y la gracia está en que desde el inicio somos testigos de sus sibilinas maneras de actuar y sus horribles ocurrencias, pero aún así es fácil imaginar lo complejo que sería para un policía o un detective relacionar a semejantes personajes con cualquier tipo de crimen. Personalmente, a mí me han resultado de lo más repulsivo, y había algunos puntos de la historia que me llegaban a revolver el estómago, cosa que es mucho decir en una novela de Stephen King, que nunca se queda corto con sus “maldades”. Además, creo que resulta más impactante la circunstancia de que los malhechores, el elemento “maligno” de la trama, en este caso no sean de origen sobrenatural, lo cual proporciona una escalofriante capa de realidad al asunto, como si se tratara de algo que verdaderamente puede suceder en el mundo real en cualquier momento.


Otro elemento muy presente a lo largo del libro es el COVID-19 y sus consecuencias sociales. Como el mismo autor explica en una nota al final de la novela, escribió la historia en pleno auge de la enfermedad en su país. La presencia del covid en la novela cambia el curso de las vidas de los personajes y por eso se menciona constantemente. Lógicamente, es la primera novela que he leído desde el inicio de la pandemia en que se habla tanto de este virus, y se me ha llegado a hacer un pelín pesado en alguna ocasión, aunque estoy de acuerdo con King en que las novelas deben reflejar la realidad que se vive en ese momento. 


Uno de los personajes que ayudan a Holly con su exhaustiva tarea es Barbara Robinson, quien, junto a su hermano Jerome, colabora ocasionalmente en la agencia de detectives. Se da la circunstancia de que a Barbara le apasiona la poesía, y sobre todo escribirla, por lo que aparecerá en varias ocasiones alguna mención a este arte dentro de la literatura y es algo que me ha gustado sobremanera.


Para terminar solo queda decir que esta novela tiene todo lo que se espera de una buena historia de Stephen King: suspense a más no poder, dos “malos” insospechados, plot twists por doquier, humanidad en cada personaje, ternura y aprecio mutuo de algunos de los protagonistas, sensibilidad por la literatura, ingenio, y muchos guiños del propio autor. Y por supuesto, se lee extremadamente rápido a pesar de ser un volumen de más de 600 páginas.

Todas Las Hadas del Reino - Laura Gallego

  Hadas, brujas, princesas en apuros, héroes en busca de hazañas y personajes de cuento pueblan la novela de la que vamos a hablar hoy. Se t...